Tras dejar pasar unos días, de la famosa moción de censura, para reflexionar sobre qué puede pasar con este gobierno “Frankenstein” como lo denomina el PP. Antes que nada, he de decir que mentiría si digo que me ha dado pena la moción de censura sobre Rajoy. Como ya comenté en otro post, ha basado su gobierno de “derechas” en subidas de impuestos y un gasto público completamente descontrolado.
Es más, he de decir que me alegro profundamente
que por fin haya cesado en sus funciones, al que considero unos de los
ministros más nocivos para la economía de España, que no es otro que Montero y
su afán recaudador. Pero vayamos al tema que nos ocupa.
Pedro, un gran oportunista, ha llegado al
poder. Un poder por el que luchó, y se obsesionó. Fue tal dicha obsesión, que casi mata por su ego, a su centenario partido. ¿Quién diría que tras conseguir
los peores resultados de la historia del PSOE, y con tan solo 84 diputados, iba
a ser capaz de gobernar? Aunque veremos a ver quién gobierna realmente, y por
cuanto tiempo... y si le dejan.
Pedro, aprovechando una sentencia judicial por
corrupción, has llegado a donde siempre soñó, la presidencia. Sin embargo, a mí
como a tantos otros, este oportunista no nos engaña. Para comenzar, ¿Cómo puedes dar tus
lecciones, cuando tu partido solo en Andalucía ha robado y desviado más de
6.000 millones de Euros? Me fascina la superioridad moral que los progresistas
os auto atribuís. No tenéis ningún tipo de problema para señalar al de enfrente
(aunque sea sin ningún tipo de pruebas), y después no sois capaces de miraros
el ombligo.
Tu investidura ha sido posible gracias a un
“rebujito” de partidos que no tienen nada que ver entre ellos, salvo un punto
en común, el odio visceral al PP. De esta forma, tenemos por un lado a los
independentistas catalanes, con su entramado de corrupción del 3%. Aunque, como
cambian de nombre cada seis meses, habrá alguno que diga no son el mismo
partido
Por otro lado, tenemos a las independencias
vascos (PNV) de derechas, y los pro etarras (Bildu). A los primeros para salvar
los presupuestos el PP, les prometió la nada despreciable cifra de 540 millones
de Euros, que ahora están en entredicho. Algo bueno tendría que traernos esto.
Y por supuesto
a Podemos y su líder supremo… pero a estos ya les dedique demasiadas líneas en otro artículo.
De momento he de decir que estoy más o menos
contento con los ministros que ha elegido, de hecho alguno incluso me gusta, y
créanme que me temía lo peor. No obstante, me da auténtico pánico, la nueva
ministra de Hacienda. Antigua consejera de Hacienda de Andalucía, y una
autentica experta en exprimir al ciudadano medio. Esperemos que no haga menos
malo a Montoro.
No quiero entrar a comentar, que el ministro de
cultura y deporte haya sido condenado por fraude fiscal, o que haya dicho públicamente que odia el deporte y los toros. O
que algunos de los ministros, no sean capaces de hablar propiamente nuestro
idioma, el castellano. Algunos ministros, tienden a utilizar el género
femenino y masculino, cuando con el segundo de ellos se engloba a ambos
términos. En fin, lo mismo tienen que volver a educación primaria, para que le
expliquen esto. Peccata minuta.
Como el PSOE tiene los aliados que tiene… ya
están hablando de crear estados federales para recoger, ¿Todas las
nacionalidades de España? El problema que tiene sanchez es que no tiene una
concepción de país, y demasiado pronto a comenzado a bajarse pantalones
frente a los independentistas. Yo me pregunto, ¿Acaso no es suficiente
con los reinos de taifas, con Comunidades Autónomas como nombre?
Esperemos más acontecimientos, y veremos cuánto tarda en derrumbarse este castillo de naipes, antes de que se vean abocados a
adelantar unas elecciones, que la mayoría de la ciudadanía pide a gritos.
Alejandro Sánchez de Ibargüen